Almería es una provincia llena de misterio y encanto natural, en la que se entremezclan parajes tan dispares que es posible disfrutar de la belleza árida de un desierto y, al tiempo, contemplar el intenso color azul del mar Mediterráneo.
Moderna y antigua. Tierra de conquistas y distintas civilizaciones, Almería a vista de pájaro permite ver una orografía accidentada en la que destacan especialmente el Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar y las localidades costeras de Carboneras y Roquetas de Mar, famosas por sus hermosas playas.
Desde lo alto, la costa de Almería, de más de 200 km, se encuentra protegida por la Sierra de Gador, cerca de El Ejido, en la zona oeste de la provincia y a pocos kilómetros de distancia de nuestro hotel de lujo en Roquetas. Justo mirando al Golfo de Almería y el Cabo de Gata.
La Sierra de Alhamilla es otra de las que rodea la costa y que cuenta con pueblos encantadores en los que disfrutar de la auténtica esencia de esta zona del sur de España:Benahadux, Tabernas, Níjar… Tradición, arte y cultura que hablan de un pueblo lleno de historia y carácter propio que ha crecido al borde del Mediterráneo.
A vista de pájaro, Almería es sol, agua y arena. Y mármol, ya que en los pueblos de interior como Máchale y Albanchez esta materia prima es una de las más preciadas y abundantes. Basta con visitar las famosas cuevas de Almanzora para comprobarlo.
